Es posible que no quieras o no puedas pasar mucho tiempo en la cocina, por lo que una ensalada como entrante puede ser tu mejor opción
La sorprendente receta de Navidad que ya puedes ir practicando: canelones marineros con salmón y bechamel de langostinos
Con este fin, los ahumados son tu mejor baza. Ya sean de bacalao, trucha o salmón, son productos disponibles en la mayoría de establecimientos. Por si fuera poco, tienen una gran variedad de precios en función del tipo y calidad del pescado, por lo que puedes encontrar con facilidad un corte que se adapte a tu bolsillo. Su delicioso sabor acompañará a todo tipo de ensaladas, perfectas para cocinar sin complicaciones esta Navidad.
Ensalada de ahumados sencilla y rápida
Para esta ensalada puedes combinar ahumados de bacalao, trucha y salmón o decantarte por utilizar solo uno o dos. Por la similitud de la trucha y el salmón, te recomendamos que te decantes por el bacalao y elijas la trucha o el salmón. Para acentuar la intensidad de sabor del pescado, esta receta cuenta con una vinagreta de mostaza. Se trata de una salsa potente, pero que no enmascarará a los ahumados.
El canónigo, por su parte, es una planta herbácea perfecta para acompañar a los sabores del resto de ingredientes. Aunque su sabor permanecerá en un discreto fondo, seguirá siendo apreciable. Además, no soltará agua como puede ocurrir con una lechuga iceberg, por lo que la ensalada se mantendrá fresca durante más tiempo.
Para esta receta solo necesitaremos la parte blanca de la cebolleta, que es más tierna y no amargará el plato. Recomendamos que guardes las puntas verdes para otras recetas, como un guiso o una salsa.
Como puedes observar, se trata de una receta flexible y fácil de preparar, que se puede adaptar con facilidad a tu gusto personal y al de tus invitados. Para elaborar esta ensalada de ahumados para cuatro personas, solo necesitas los siguientes ingredientes:
125 gramos o una bolsa de canónigos
100 gramos de salmón o trucha ahumada
100 gramos de bacalao ahumado
Una cebolleta
Un tomate
Cuatro cucharadas de aceite de oliva
Dos cucharadas de vinagre de vino
1 cucharadita de mostaza de Dijon
Sal
Si vas a comprar el pescado ahumado envasado, ten en cuenta que es vital que el pescado tenga un color uniforme y sin zonas negras. En el caso del salmón y la trucha, deben presentar colores vivos, pero sin estridencias antinaturales. El bacalao deberá ser de un color blanco, brillante. Para preparar esta salsa de ahumados, deberás seguir los siguientes pasos:
Lava con insistencia los canónigos debajo del grifo. Si son de bolsa, es posible que ya vengan lavados y puedas saltarte este paso.
Separa las lonchas de bacalao y salmón o trucha y córtalos en tacos. Si has comprado el lomo ahumado completo de los pescados, podrás cortar tacos con una forma más homogénea.
Corta las cebollas en juliana y el tomate en dados.
Prepara una vinagreta con la mostaza. Para ello, echa el aceite, el vinagre y la mostaza en un cuenco y bate con energía hasta que se integre bien la mezcla.
En un plato, pon una cama con los canónigos, seguidos de los ahumados, la cebolleta y el tomate. Riega la salsa con la vinagreta y añade sal.
Si quieres experimentar con esta receta, puedes sustituir el tomate por unos gajos de naranja, para añadirle un toque cítrico. Para ello necesitarás una naranja, que pelarás y cortarás en rodajas finas, para distribuir en el fondo del plato. Coloca los canónigos y los ahumados sobre la fruta y adereza con la vinagreta. Si buscas un sabor aún más intenso, prescinde de los canónigos.
Cómo ahumar pescado
Si tienes tiempo y quieres impresionar a tus invitados, debes saber que es posible ahumar el pescado en casa para tu ensalada, sin brasas de madera ni preparativos aparatosos. Para preparar un delicioso pescado ahumado casero solo necesitarás estos ingredientes:
Un lomo entero de bacalao, trucha o salmón
150 gramos de azúcar
500 gramos de sal gruesa y ahumada
Eneldo fresco
Una sartén y un artículo que pese aproximadamente un kilogramo, como un litro de leche
Puedes añadir otro tipo de especias o marinar previamente al pescado antes de ahumarlo para obtener un resultado totalmente distinto. Una vez domines esta receta, no dudes en experimentar con distintos elementos. Antes de ponerte manos a la obra deberás congelar el pescado unas 48 horas antes del cocinado, para evitar que tenga una contaminación por anisakis u otro tipo de parásitos.
Una vez descongelado, perfila los laterales y retira las espinas con la ayuda de unas pinzas limpias. Después, mezcla en una fuente la sal ahumada y el azúcar. Coloca encima el lomo de bacalao, trucha o salmón con la piel hacia abajo, y cúbrelo con más sales. Después, tápalo con papel film y coloca una sartén encima. Sobre la sartén, deposita el litro de leche o el peso de tu elección.
Deja que el pescado repose así 24 horas, destápalo, retira el líquido resultante y lava el salmón bajo el grifo, retirando las sales. Tras esto, estará listo para que lo cortes en lonchas finas.